Señalar al culpable como escudo de los perpetradores

Como utilizan la psicología de masas para evitar responsabilidad y castigo

Querido lector, primero observe el siguiente video:

Después de ver este video vamos a analizar el sentido del contenido del artículo mencionado en el video y el porqué este tipo de artículos, que aunque parecieran evidentemente ridículos e irrelevantes, tienen un propósito más vil y peligroso.

Si quiere leer el artículo en español puede hacerlo en este enlace: https://javiypilar.com/sabian-por-que-los-no-vacunados-no-hicieron-mas-para-advertirnos/

El artículo anterior directamente acepta que lo que dijeron los no inoculados, considerados por la mayoría como "antivacunas", "conspiranoicos" y "negacionistas" resultó ser cierto, tenían razón; reconoce tajantemente que había información de efectos adversos secundarios previo a la aplicación de las vacunas, así como complicaciones alérgicas graves, coágulos de sangre y demás complicaciones que no fueron escuchados por la mayoría. Incita a creer que los que fueron a inocularse considerándose a sí mismos que hacían lo correcto y tenían buenas intenciones, fueron incapaces de considerar que familiares y amigos que se acercaron a proponerles otra perspectiva, lo hicieron de forma altruista y también tenían buenas intenciones y pensaron que hacían lo correcto. Motiva erróneamente a creer al lector que los ahora inoculados, no fueron conscientes de que ellos mismos decidían no escuchar a los "antis" y que no tuvieron otra alternativa más que dejarse llevar por la sociedad, como si no fueran personas críticas, autónomas, con sentido común y criterio propio.

Se burlan de la inteligencia del lector

Da a entender equivocadamente que fueron engañados tanto por sus familiares, amigos y conocidos como si estos últimos fueran los únicos en tener acceso a la información que se iba generando y divulgando. Tratan al lector como objeto y no como sujeto, tratan de empequeñecerlo y eximirlo de la culpa y responsabilidad por su salud y cuerpo.

Exime al descarado ejercicio de las redes sociales, los medios masivos de "comunicación", autoridades, verificadores de hechos y demás de la responsabilidad por censurar la divulgación de la información real y científica. Culpa a los "antis" o teóricos de la conspiración de que los ahora inoculados y engañados no escucharon ideas bastante razonables cuando fueron previamente preparados para eso sin saberlo, gracias a estrategias de propaganda y manipulación mental.

El propósito escondido

Pero el propósito escondido de este tipo de artículos como el de IQfy, es una forma de escape y sobre todo de distracción para la sociedad, para ventilar las frustraciones, enojo, rabia, desesperación, impotencia, desconcierto, desesperanza y demás sentimientos encontrados durante la pandemia, y dirigir esos sentimientos hacia el mismo nivel; hacia familiares, amigos, conocidos y desconocidos que les advirtieron de anomalías en la narrativa de la "pandemia del COVID-19", responsabiliza vilmente a esas personas hacia las que, tal vez, ya se tenía ese sentimiento de desconfianza o molestia por incentivarlos a cuestionar y mostrarles otras alternativas.

También hacia esas figuras de autoridad o voces alertando, como doctores, investigadores, periodistas, críticos, es decir, dirigir todo ese conjunto de sentimientos negativos para que se queden en este mismo nivel y no escalen, no se dirijan los reclamos, las responsabilidades legales y obvias culpas hacia quienes en realidad tienen toda la responsabilidad y quienes incentivaron o incluso provocaron este problema: los responsables de los organismos, dependencias, subsecretarías, ministerios de salud, los gobiernos, las ONGs, la OMS, los “filántropos”, los perpetradores, a esos no los tocan. Quedan protegidos porque este tipo de artículos señalan al culpable antes de que se llegue a pensar en los verdaderos responsables y partícipes.

Este tipo de artículos que menciona el video, son esos escudos que los mismos perpetradores concibieron conociendo la psicología de masas, para disipar los posibles ataques hacia ellos y se presentan justo después de que la mayoría ha sido inoculada. El cese de censura se inicia en las redes sociales, como la extinta Twitter, Youtube y demás plataformas, incluso a los medios tradicionales para el desahogo de frustraciones, pero sin llegar a las instancias legales.

Una vez calmadas las aguas

Después de acusar a la gente informada, medicos e investigadores, informantes o soplones como teóricos de la conspiración culpables, se les exige apoyar a los inoculados, engañados y lesionados para que les ayuden, algo que obviamente haremos; siempre en situaciones de emergencia, llámese desastres naturales como sismos e inundaciones el pueblo termina ayudándose, no es diferente en esta situación.

El "teórico de la conspiración" ya cuenta incluso con protocolos de desintoxicación y alternativas post-vacuna, no por ser un Nostradamus moderno sino porque ha estado en contacto con la ciencia y la verdad, pero lo más grave es que la desconfianza de los inoculados continúa incluso para aceptar esas opciones. El siguiente paso de esta operación planeada es señalar el camino a seguir en consecuencia. Todo lo tienen estudiado. En este proceso de operación psicológica del manejo de masas se requiere hacer algo más, se debe regenerar la confianza perdida en el gobierno, autoridades y las instituciones. Es decir, no pasó nada, borrón y cuenta nueva, aunque el problema mayor persista y con el riesgo de la posible repetición a futuro de estas mismas artimañas.

El último paso consiste en generar más artículos y contenidos que reivindiquen las acciones de gobiernos, autoridades e instituciones, pero eso lo iremos analizando con la ayuda de un artículo más en este enlace.

Consulte nuestro Descargo de responsabilidad.

Ernesto Camacho Puga

Diseñador gráfico, web, semiólogo, lector empedernido.